Es una iniciativa del gobierno alemán cuyos recursos provienen de los permisos de concesión en los esquemas de comercio de emisiones.
IKI financia proyectos que aporten a la mitigación de GEI, la adaptación a los impactos al cambio climático, conservación de los sumideros naturales de carbono con enfoque en REDD+ y la conservación de la diversidad biológica.